Hace 9 años. Eran las 6,20 de la madrugada de un 8 de agosto del 2003. Nació con 3,230 kg y no sabíamos si era Mireia o Liberto. En las distintas ecografías no se dejaba ver, y esperó hasta el último momento para decirnos que era Mireia.
Han pasado 9 años. Y ese precioso bebé está creciendo. Está en una edad en la que todavía es una niña pero con "cosas de mayor". Es, como digo yo, una pre-adolescente.
Celebraremos muchos cumpleaños. Crecerá y se hará una mujer. Pero para mí, siempre será MI NIÑA. MI PRECIOSA NIÑA.
Te quiero Mireia.