¿Tiene toda persona derecho a dar su opinión? Si. Por supuesto que si. ¿Tiene todo o parte de un colectivo a expresar sus opiniones? Claramente si. ¿Podemos expresar nuestras quejas, sugerencias, pareceres, reivindicaciones...etc? Rotundamente si. Es más, es necesario, es básico, es bueno, es lo normal para cualquier democracia que se precie y sobre todo para las personas que las expresan.
Hasta ahí todos de acuerdo, excepto a los que no les gusta escuchar a los demás, a los antidemocráticos, que los hay y más de los que pensamos. Pero surge la duda de si todo escenario es el apropiado para expresarnos libremente. Algunos pensarán que sí, que te puedes y debes expresar en cualquier sitio. Yo, sin embargo, soy de la opinión que no todos los escenarios son los adecuados para ello.
Y con ello me refiero a la última gala del cine español, la entrega de los premios Goya. Aún estando de acuerdo en parte con los comentarios de los premiados, no creo que el escenario fuera el más adecuado. Hay otros ámbitos para criticar los recortes del Gobierno del Partido Popular. Los hay como salir a la calle, militar en partidos políticos o sindicatos para cambiar las cosas desde dentro (que es donde se deben cambiar), los medios de comunicación, etc... o incluso, y por qué no, rodar una película o un documental denunciando estos recortes abusivos, ah, y lo recaudado, darlo a los necesitados.
También me quiero referir al uso que se hace en ciertos recintos deportivos como pabellones y estadios de fútbol para expresar ciertas ideologías nazis o independentistas. Las primeras ni libertad de expresión ni nada. Y en cuanto a las segundas, podrás sentirte español o vasco, catalán, gallego o aragonés pero no es el lugar apropiado para mezclar política y deporte. Dos ámbitos que deben estar radicalmente separados y diferenciados. Por el bien de algunos deportes y, sobre todo, de los aficionados, que de todas sensibilidades hay.
Además, el respeto a las instituciones del Estado debe ser primordial en cualquier democracia. Y hoy en España este respeto se está perdiendo. Se pita (por ciertos sectores) al Rey en los torneos que llevan su nombre. Se acude a los Plenos de ayuntamientos y/o parlamentos a protestar, a gritar, a exhibir pancartas y,para esto, tampoco son los escenarios apropiados.
Es verdad que la política y los políticos (algunos) son un verdadero problema, y que padecemos una grave crisis política que está estrechamente unida a la crisis institucional y económica que tenemos. Pero tengo que decir que, y tal como dice Rosa Díez, "si los ciudadanos pasamos de la política, al final, los políticos pasan de los ciudadanos"
Protesta. Quéjate. Rebélate. Lucha. Cambia las cosas pero desde el respeto, desde los escenarios que tenemos para ello, y no mintiendo, imponiendo, pisoteando al resto de personas.
